del discurso de JORGE GRAINGER PANCERA en el funeral:


Tratando de resumir un poco la historia de mi padre, todo empezó hace exactamente 100 años cuando mi abuelo y mi abuela, cada uno por su lado, llegaron a Chile. Aquí se conocieron, se enamoraron, se casaron y hace algo más de 93 años tuvieron un hijo, Jorge, nuestro padre, a quien hoy estamos acompañando.

Mi abuelo murió joven, y mi padre se hizo cargo de su madre, nuestra Granny, y la cuidó hasta el último día. Fue un buen hijo, siempre preocupado por ella.

Conoció a Luisa, se enamoraron, y se casaron. Mi padre quiso entrañablemente a su Luchita, y hasta el último día, con todas sus limitaciones, la contempló amorosamente.
Sin duda fue un buen esposo.

Tuvieron dos hijos, mi hermano Patricio y yo. Fue un buen padre. Nos educó en el camino de la rectitud, y nos inculcó los valores que nos han guiado, y que tratamos de traspasar a nuestros hijos, sus nietos. Por cierto, también fue un buen abuelito.

Eligió el 15 de Agosto, día de la Asunción, para casarse, al amparo de la Virgen María. Dios quiso que hoy, víspera del 15 de Agosto, 61 años después, en esta su parroquia por más de 50 años, despidamos su vida en esta tierra, para que la misma Virgen lo lleve de la mano a encontrarse con Dios.

Gracias papá por todo lo que nos diste, por tu consejo, tu cuidado, tu cariño, tus tallas en medio de la seriedad, por esos ojos azules con los cuales, incluso en los últimos días, ya sin poder comunicarte, nos mirabas y nos decías cosas.

Gracias a las personas que amorosamente lo cuidaron en estos últimos años.
Mucha fuerza a mi madre, y que nosotros sus hijos y sus nietos, le brindemos muchos momentos felices en el futuro.
Y gracias a todos uds. por acompañarnos en este momento.

del discurso de JORGE GRAINGER PANCERA en el funeral

del discurso de FRANCISCA GRAINGER HURTADO en el funeral

Abuela, amigos y familiares:

Estamos todos aquí para despedir a mi tata que con mucho pesar nos ha dejado el día de ayer.

Hoy quería recordarlo en este día como un amigo, tío, gran padre y fabuloso esposo, para mí más que nada el mejor abuelo del mundo.

Que acompañó a todos sus nietos desde nuestros primeros días de vida y que me acompañó a mi desde mis primeros pasos, mis primeras travesuras y en mis primeros viajes.

Tata:

Te cumplí, hace tres años atrás te juré que estaría contigo hasta el último suspiro de tu vida, te acompañé en esa interminable semana en la clínica y saliste adelante.

Y ayer hasta el último minuto estaba junto a ti. Te quiero y siempre serás unos de los hombres más importantes de mi vida.

Para mi tata, con todo el amor del mundo, de tu nieta Francisca.

del discurso de FRANCISCA GRAINGER HURTADO en el funeral